Así lo explicó en una rueda de prensa convocada tras la reunión de la Junta de Jefes de Estado Mayor (JULEM), y que preside el ministro de Defensa, Federico Trillo, quien confirmó que se ha descartado enviar a la Guardia Civil a Iraq como policía militar, dentro del contingente para el mantenimiento de la paz y de la seguidad.

Díaz Moreno añadió que primero se pensó en crear un cuerpo internacional de policía compuesto por unos 6.000 efectivos, con el fin de que pudieran hacer frente a los problemas "graves y difíciles" de seguridad que se registran en la capital de Bagdad.

Tras descartarse esta posibilidad, continuó Díaz Moreno, se planteó la creación de "una especie de milicia policial, a la espera de la reconstrucción del cuerpo de policía".

En este sentido, explicó que expertos de la Guardia Civil han esado ya en Bagdad y han explicado a la autoridad provisional de Iraq cuáles son los modelos de la policía española, en referencia tanto a la Benemérita como al Cuerpo Nacional de Policía.

Además, los agentes han documentado la experiencia española en otros países que han necesitado reconstruir su propia policía. "Por el momento, la aportación ha sido a nivel de expertos y no a nivel de prestación directa de servicios de seguridad", agregó.

Por su parte, el ministro de Defensa insistió en que el cotingente español desplazado a Iraq forma parte de una fuerza internacional con mandato de Naciones Unidas para el mantenimiento de la paz.

El ministro de Defensa se refirió a la seguridad de los soldados españoles frente a ataques como el sufrido por el contingente polaco y aseguró que el riesgo que corren los militares de nuestro país es "moderado".

En este sentido, añadió que el jefe de las tropas españolas en Iraq, el general Alfredo Cardona, se está entrevistando con algunos de los líderes reigiosos chiitas, que "se han mostrado todos muy favorables a la presencia española".