Blanco hizo estas manifestaciones en el curso de su comparecencia en el "Foro Europa", donde dijo que la gestión del Gobierno del PP ya ha sido juzgada por los ciudadanos el pasado 14 de marzo que han expresado su opinión sobre "los comportamientos y las formas" con las que han gobernado.

Pese a esta afirmación, dijo que el PSOE tendrá por norma el apoyo a las comisiones de investigación como vía de regeneración democrática y reconoció que los ciudadanos "tiene derecho a saber la verdad" sobre esos asos, por lo que el futuro gobierno socialista se compromete a trasladar a la sociedad todos los datos que tenga en su poder.

El dirigente socialista estuvo arropado en su comparecencia por un buen número de compañeros de partido entre los que se encontraban el presidente del PSOE, Manuel Chaves; Enrique Múgica, Rafael Simancas, Jesús Caldera, Magdalena Álvarez, Alfredo Pérez Rubalcaba y Juan Fernando López Aguilar.

Una de las promesas electorales que más incertidumbre ha ganerado es la de retira las tropas españolas de Iraq antes del 30 de junio. Tras los llamamientos hechos en contra de esta decisión desde Estados Unidos, Blanco aseguró que la decisión es "firme" y que se realizará en las fechas previstas, salvo que Naciones Unidas se haga cargo de la situación y patrocina la presencia de tropas.

En relación a la muerte del cámara de Tele 5 José Couso en el ataque al hotel Palestina de Bagdad, dijo que el Gobierno que presidirá Zapatero seguirá pidiendo explicaciones a la Administración noreamericana porque las recibidas hasta ahora son "insuficientes y confusas".

Además, el PSOE recuperará una iniciativa parlamentaria que presentó bajo mandato del PP que establecía medidas de protección y compensatorias para los ciudadanos españoles en zonas de conflicto, que afectaría a la familia Couso, entre otras.

VICTORIA INESPERADA

Blanco hizo un análisis de las causas que han llevado a la derrota electoral del PP. Reconoció que la victoria socialista fue "inesperada" y la desvinculó de lo atentados de Madrid del pasado 11 de marzo.

A su juicio, el deseo de cambio que anidaba en la sociedad española se ha explicitado el pasado 14 de marzo, pese a que los ciudadanos tenían una gran "desconfianza" en que su voto sirviera para ajustar su deseo a la realidad.

Para Blanco, el PP interpretó "erróneamente" su mayoría absoluta porque "creyó que en la sociedad española se había obrado una mutación ideológica que les legitimaba para hacer una política de derechas sin complejos".

Esas plíticas han ido generando "grandes bolsas de malestar social" que han acabado aflorando a la superficie y que se han manifestado contrarias a unas posturas que "parecían querer resucitar el mito de las dos Españas".

Según dijo, los populares tras el escaso correctivo que les supusieron las elecciones municipales de mayo creyeron que todos sus actos quedarían en la "impunidad" y que la sociedad española vivía una suerte de "anestesia" que le garantizaba apoyos mientras las situación económica fuese favrable.

Blanco criticó en especial la "política palaciega" practicada por Aznar, la campaña electoral intencionadamente "gris y desmovilizadora" y la "mala gestión" de los acontecimientos del 11 de marzo.

Precisamente en referencia a las afirmaciones hechas ayer por el secretario general del PP, Mariano Rajoy, de que habría ganado las elecciones de no haberse producido los atentados de Madrid, el dirigente socialista dijo que esa "interpretación" de la victoria socialista es "insultante para los mllones de españoles que optaron por el cambio".

Rechazó, asimismo, las acusaciones del PP que señalaban a los socialistas como los responsables de la convocatoria de las movilizaciones de protesta ante las sedes populares que se vivieron en la jornada de reflexión. En su opinión, éstas fueron manifestaciones pacíficas y espontáneas de los ciudadanos que reclamaban la verdad sobre los atentados de Madrid antes de las elecciones y reprochó al PP que compareciera ese mismo día pidiendo apoyo para consegurlo la mayoría absoluta desde el telediario de máxima audiencia.

Sobre la decisión del fiscal general del Estado, Jesús Cardenal, de iniciar proceso penal contra los manifestantes en esa jornada, dijo que no cree que haya materia penal para porceder en su contra y apuntó la posibilidad de que el comportamiento del jefe de los fiscales incurra en indicios de prevaricación.

La victoria del PSOE se basó, según su análisis, en la masiva participación de jóvenes en estas elecciones. Reconoció que el "ramatismo" de los días previos a las elecciones tuvieron influencia en la jornada pero afirmó que el deseo de cambio era previo a los atentados y dijo que el voto significó una petición de cambio "en las formas del ejercicio del poder", tras demostrarse que las formas "autoritarias" son "ineficaces".

Insistió, en que el PSOE pretende abrir una nueva etapa de Gobierno basada en el diálogo y en prácticas de carácter "incluyente", tal y como se está demostrando en la negociación que se desarrolla en esto días en el Congreso para acordar la composición de los órganos de dirección de la Cámara.

Además valoró de manera positiva la reacción de empresarios y banqueros tras la victoria electoral del PSOE, y la atribuyó al hecho de que son conscientes de que los socialistas no constituyen ninguna "amenaza" para el futuro económico de España.