En un comunicado, la organización señala que el III Convenio de Ginebra, que regula el tratamiento de los prisioneros de guerra, exige que éstos reciban un trato humano en todo momento, lo que incluye protegerlos de la "curiosidad pública".

"Aunque fuera necesario demostrar que Sadam Husein está vivo y bajo custodia, no hacía falta mostrarlo mientras se le examinaba la boca y el pelo, lo que hace dudar de la intención que motivó la distribución d dichas secuencias", apunta Amnistía Internacional.

JUECES NO IRAQUIES

Por otra parte, Amnistía pidió la inclusión de jueces no iraquíes en el tribunal que juzgará a Sadam Husein, ya que aunque ese país tiene una firme tradición legal, no tiene experiencia en crímenes de guerra y crímenes de lesa humanidad.

El pasado 10 de diciembre, el Consejo de Gobierno iraquí anunció la creación de un Tribunal Especial de Iraq para juzgar, entre otros detenidos, a Sadam Hussein. El estatuto del tribunal estblece que los jueces y fiscales sean iraquíes y abre una posibilidad a que el Consejo de Gobierno incluya magistrados extranjeros con experiencia.

Para Amnistía, ese tribunal debe ser justo, competente, independiente, imparcial y respetuoso con la legalidad internacional. "La gravedad y la escala de las violaciones de las que se acusa a Sadam Husein ponen de relieve la importancia primordial de que sea juzgado de una forma incuestionablemente imparcial", añade.

Además, la organización exige la ablición definitiva de la pena de muerte en los delitos previstos por el tribunal especial y que Sadam Husein sea tratado como prisionero de guerra.