Después de la iniciativa de Alemania y Francia ante la crisis de Irak y sobre el futuro de Europa, Rodríguez Zapatero dejó car en la Ser la idea de que España apenas juega en el escenario internacional.

"No parece que estemos en el eje decisivo del futuro de Europa. Estamos en el eje de la sumisión a Bush como única política exterior de España", dijo. "Aznar ha demostrado que ocupa muy poco espacio en lo que es el debate de Europa".

El líder socialista reconoció las escasas probabilidades de que el presidente acceda a celebrar una sesión plenaria monográfica sobre este asunto en el Parlamento, lo que juzgó "muy grave". "Aznar es de los pocos europeos que apoyan incondicionalmente a Bush y sus intenciones unilaterales de acciones bélicas contra Irak y el único gobernante de un país importante de Europa que no ha acudido al Parlamento", denunció.

En este punto, le urgió a aclarar si ha llegado a algún compromiso con Estados Unidos para la utilización de capacidades militares españolas, y recordó que ha habido ocasiones en las que España se ha opuesto a respaldar a Washington en una acción unilateral.

Recordó por ejemplo, que la guerra del Golfo fue consecuencia de la invasión de Kuwait por parte de Irak y estuvo respaldada por Naciones Unidas, pero en el bombardeo de Libia de 1986 el Gobierno socialista negó el apoyo a Estados Unidos e, incluso, la utilización de las bases.