Las ventas españolas a Irak, aunque todavía dentro de niveles relativamente bajos, han experimentado un crecimiento exponencial desde que se suavizó el bloqueo contra ese país asiático tras la Guerra del Golfo.

Todavía en 1996 España no exportaba absolutamente nada a Irak, y en 1997 ya vendió por 4,7 millones de euros. En el periodo 1997-201, las ventas españolas a Irak, país sobre el que actualmente pesa una amenaza de guerra por parte de Estados Unidos, sumaron más de 200 millones de euros.

El año pasado, casi un tercio de las ventas realizadas por España a Irak fueron de alimentos, principalmente productos lácteos y huevos. Aún mayores fueron las exportaciones de bienes de equipo, que ascendieron a 43 millones de euros.