Además, el dato conocido hoy indica, según Rato, que la liberalización y competencia de sectores como la telefonía, la energía o los servicios, reormas como la del suelo y el esfuerzo por reducir el déficit público "producen efectos muy beneficiosos", no sólo para el conjunto de la economía, sino para los ciudadanos.

El aumento del poder adquisitivo y la situación de recuperación económica sin presiones sobre los precios, prosiguió Rato en los pasillos del Congreso, hace posible que los ciudadanos puedan planificar sus salarios y ahorros en un horizonte de estabilidad.

Como ayer anunció el presidente del Gobierno, José María Aznar, Rato asguró que el Gobierno continuará su política de reducción del déficit público y de liberalización de la economía para mantener esta tendencia.

A pesar de las "oscilaciones técnicas" que pueda provocar la "extraordinariamente baja" base de comparación en 1997, el ministro reiteró que el Ejecutivo contempla la evolución de la inflación durante este año dentro de los objetivos fijados en el cuadro macroeconómico que acompañó a la Ley de Presupuestos.