En función de esos datos, la subida experimentada por los alimentos envasados fue en el mismo periodo del 2,28%, un comportamiento bastante más moderado.

Si se compara con la evolución general del conjunto del Indice de Precios al Consumo, los alimentos frescos han subido muy por encima del 3,9% que registra la inflación en noviembre.

Sumando los alimentos frescos y los envasados, lenar la cesta de la compra le cuesta a los españoles en noviembre de 2002 un 5,74% más que en el mismo mes de 2001.

Entre las subidas más destacadas, por encima del 20% en un año, se encuentran las de las peras de agua, con un 29,26%, los tomates para ensalada (28,85%), las chirlas (26,66%), la anchoa y el boquerón (25,50%), las sardinas (22,04%), los mejillones (21,33%), el aceite de girasol (21,23%) y las cebollas (20,37%).