Labordeta, que inició su intervención condenando el intento de atentado al periodista Jesús María Zuloaga, exigió el pleno empleo, condenó los contratos basura y pidió un desarrollo sostenible y una vertebración del territorio que vaya a favor de los ciudadanos y no a favor de la epeculación.

Anunció el voto en contra de la Chunta a la investidura de Aznar, pero aseguró que no estarán en contra por sistema porque su actitud será "dialogante y constructiva".

En su respuesta a Labordeta, que había hecho una breve referencia histórica sobre la evolución de los derechos de Aragón, Aznar le recordó que "hay muchos otros diputados aragoneses en otros partidos que pueden hablar también de Aragón" y "que saben que todos representan al conjunto de la nación española, que es lo que stamos representando aquí en este momento".

Aznar aseveró también que no participa del discurso de que "España es una cosa muy rara, que está formada por distintos territorios, llámense como se llamen, que han sido históricamente agraviados no se sabe muy bien por qué durante siglos, desde tiempo inmemorial".

Agregó que comparte con Labordeta los deseos de mejora de Aragón, pero "situemos un Aragón real, no un Aragón imaginario", dijo Aznar tras considerar "un poco excesivo" que se diga que "paraestudiar, los estudiantes aragoneses tienen que marcharse de Aragón".