Bangladesh encabeza la lista de países con mayor proporción de menores de cinco años con un peso inferior al normal, un problema que afecta al 48% de niños y niñas de este país, según el último balance sobre la nutrición infantil presentado por Unicef.

Es uno de los países con mayor densidad de población, con los habitantes concentrados en los "slums" o barriadas marginales de las ciudades sin acceso a necesidades básicas como agua potable, instalaciones higiénicas y servicios de salud.

Los niños menores de 5 años que viven en estas áreas están muchas veces desatendidos, explica Intervida, porque sus padres trabajan durante todo el día y no pueden dejarlos en un ambiente propico por falta de medios. Así, muchos se quedan solos o a cargo de sus hermanos mayores, que dejan de ir a la escuela para ocuparse de los pequeños.

Esta es una de las situaciones que hace que estos niños no tengan acceso a una dieta regular y equilibrada y sufran desnutrición, presentando una carencia importante de vitaminas y minerales. Esto se traduce en una pérdida de resistencia frente a las infecciones y de la capacidad de recuperación después de una enfermedad, entre otras cosas.

Ante esta situación, Intervida abrió, en 2001, su primera escuela en Dhaka para proporcionar a los niños la posibilidad de recibir una educación formal, así como apoyo médico y nutricional para garantizar su desarrollo mental y físico.

Posteriormente, en 2002, abrió el primer centro de cuidados de día para atender a los hermanos de entre 2 y 5 años de los niños y niñas que acudían a estas escuelas para evitar que faltasen a clase para cuidarlos.

En estos centros se protege a los niños de las enfermedades y se les ofrece asistencia médica si están enfermos. Como medida de prevención, reciben tabletas parasitarias, suplementos alimenticios y vacunas contra la hepatitis B, entre otras cosas.

Asimismo, estos Centros de Día ofrecen revisiones generales periódicas y tratamientos médicos para los que padezcan alguna dolencia que pueda tratarse sin acudir al hospital.

Los niños reciben también material escolar, participan en juegos educativos y en actividades sobre cómo comportarse ante situaciones de riesgo como cruzar la calle, entre otras cosas.