A su juicio, "el sangriento general Pinochet, instaurador de una de las dictaduras más crueles de los últimos decenios, debe ahorrar a su país la vergüenza nacional e internacional que supone verle ocupar un escaño vitalicio en una Cámara de reresentación popular como es el Senado, y las tensiones que causa en la democracia chilena su permanencia en cargos institucionales".

"A la investigación sobre la fortuna del dictador para comprobar si, demás de salvador de la patria a sangre y fuego, fue un ladrón", añaden, "se van acumulando las querellas contra Pinochet por secuestros, homicidios y torturas".

La asociación subraya que "es digno de elogio que el juez García Castellón de la Audiencia Nacional mantenga abierta, con razones jurídics de peso, una causa contra el dictador Pinochet y varios de sus compinches".