Según las citadas fuentes, el intento de contactar con la banda terrorista por parte del PP se produjo en los días posteriores al asesinato del dirigente popular. Los contactos se realizaron en Iparralde y no fueron autorizados previamente por el presidente del PP, José María Aznar.

López de la Calle, cuyo nobre se barajó ayer como intermediario en la operación, desmintió hoy rotundamente que hubiera actuado como mediador, aunque reconoció que mantuvo una conversación con un "hombre del campo del periodismo y que pertenece al mundo de HB".

Según las citadas fuentes, en esa conversación Muñoz advirtió a López de la Calle que un intento de profundizar los contactos entre el PP y el entorno de ETA podría ser interpretado como un signo de debilidad por la banda, en un momento en que el PP estaba señalado comoobjetivo múmero uno de los terroristas.

De la Calle aseguró hoy que mantenía contactos con el ex director de "Egin" (en ningún momento concretó que se tratara de él, aunque sí de "un hombre del campo del periodismo") desde hacía 25 años y que el encuentro tuvo un carácter estrictamente personal.

Sin embargo, las fuentes consultadas por esta agencia aseguraron que el encuentro se realizó a instancias de la dirección del PP vasco para conocer "si ETA estaba en guerra declarada contra ellos".

Mñoz habría transmitido a su interlocutor la existencia de discrepancias internas en el mundo 'abertzale' sobre el uso de la violencia y advirtió de un posible recrudecimiento de las acciones contra objetivos políticos en los próximos meses, auspiciados por la 'línea dura' de ETA para reafirmar sus tesis.

Según su análisis, es posible que se produzcan descolgamientos de algunos militantes de las tesis ultranacionalistas, que irán pasando a engrosar las filas de Elkarri, dedicada a buscar una solución pctada sin recurrir a la violencia, lo que será alentado por el PNV.

De la Calle le comunicó que sería importante que esa situación fuera conocida por algunas personas, entre ellas el presidente del PP vasco, Jaime Mayor Oreja, extremo descartado por Muñoz.