El letrado declaró hoy a Servimedia que desconoce las causas que han motivado la retirada de los dos agntes, al tiempo que señaló que su presencia empezó a echarse en falta el pasado lunes.

Manrique explicó que los dos escoltas que han sido apartados de su servicio viajaban en un vehículo que se encargaba de vigilar los desplazamientos de Amedo y Domínguez.

La situación penitenciaria de los dos ex funcionarios ha sido objeto de polémica durante la presente semana, a raíz de unas declaraciones de la secretaria de Estado de Interior, Margarita Robles, quien el pasado jueves afirmó que no comparte elargumento de que Amedo está más seguro en la calle que en la cárcel.

Por su parte, el ministro de la Presidencia, Alfredo Pérez Rubalcaba, evitó pronunciarse ayer sobre este asunto, durante la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros. No obstante, dijo que la situación de Amedo y Domínguez no responde al tercer grado penitenciario, porque ambos no tienen que cumplir el requisito de pernoctar en la prisión.

Asimismo, la juez de vigilancia penitencia de Madrid, María del Prado Torrecilla, a pedido al juez Baltasar Garzón que le informe si Amedo y Domínguez están cumpliendo las condiciones que ella fijó al autorizarles a no pasar la noche en prisión, pese a estar clasificados todavía en tercer grado penitenciario.

Los dos ex policías, condenados a 108 años de cárcel por varios delitos cometidos por los GAL, fueron liberados de la obligación de dormir en la cárcel a petición de Garzón. Ambos están obligados a permanecer en sus domicilios desde las once de la noche hasta las seis de la mana de día siguiente.