INTERIOR ORDENA A POLICIA Y GUARDIA CIVIL INTENSIFICAR LA VIGILANCIA SOBRE LOS GRUPOS VIOLENTOS
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l secretario de Estado para la Seguridad, Rafael Vera, ha remitido una circular a los responsables de la Policía y Guardia Civil, delegados del Gobierno y gobernadores civiles en la que les insta a intensificar el trabajo de información y control de los grupos radicales y violentos, como "heavys", "punkies", "ultras" y, especialmente, "skin heads".
En la instrucción, Vera recomienda aumentar las labores de información general sobre esos grupos, incidiendo en la vigilancia de los "cabezas rapadas", cuy "ideología ultra y de odio u hostilidad hacia determinadas etnias o grupos de extranjeros se está traduciendo en habituales incidentes y alteraciones de la paz ciudadana en numerosos lugares de la geografía española".
Asimismo, indica que también debe incrementarse el seguimiento de los grupos de jóvenes "ultras" seguidores de clubes de fútbol, "que frecuentemente cometen actos de gamberrismo causando daños a personas y bienes".
Además, ordena que los servicios de protección de la seguridad ciuddana de la policía y Guardia Civil presten especial atención a los lugares de reunión de estos grupos, planificando dispositivos de carácter preventivo y efectuando los controles e indentificaciones que sean necesarios.
Añade que cuando estos grupos actúen ilegalmente, la actuación policial se realizará "con todo el rigor que permita la normativa vigente, impidiendo que los desórdenes y alborotos alteren la pacífica convivencia ciudadana".
En la circular, Vera también resalta el consumo de alcoho por parte de los más jóvenes y lo califica como "una importante hipoteca en la salud de los menores".
Tras considerar que el alcohol es "un serio problema para el futuro de las nuevas generaciones, tanto en el aspecto social como sanitario", afirma que, además, es la causa directa o indirecta de numerosas infracciones cometidas por los menores.
Por ello, a su juicio, las distintas instituciones y las fuerzas de seguridad del Estado deben colaborar para aportar soluciones que palíen los riesgos dl consumo de alcohol o de drogas ilícitas por los menores.
En este sentido, recomienda a los responsables policiales que pongan énfasis en la prohibición de la venta de alcohol a menores de 16 años y en vigilar su asistencia a determinados establecimientos públicos cuya entrada tienen prohibida.
Asimismo, incide en la necesidad de coordinación entre las fuerzas de seguridad del Estado y las policías locales, ya que estas también tienen competencias en el control de los establecimientos públicos, ue, además, son muy numeroso.
Finalmente, recuerda que según la "ley Corcuera" son infracciones originar desórdenes graves en las vías, espacios y establecimientos públicos, la tolerancia en el consumo o tráfico de drogas en locales públicos, y la admisión de menores en locales de espectáculos o establecimientos públicos cuando esté prohibida, así como la venta o servicio de bebidas alcohólicas a los mismos.
(SERVIMEDIA)
10 Dic 1992
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