Ramírez asegura que en Melilla se teme un "desbordamiento inmigratorio" y añade que después del traslado de los inmigrantes, realizado en varias tandas por Interior a traés de la Delegación del Gobierno, el número de inmigrantes ha quedado reducido a 350.

Esos inmigrantes ilegales se encuentran albergados en la antigua Granja Agrícola, un lugar que se "más amplio y con mejores condiciones" elegido para sustituir el último local empleado para los mismos fines, el estadio local de fútbol, y que ya se encuentra "casi completo".

Asimismo, ramírez agregó que el principal problema que encuentran a la hora de repatriar a los inmigrantes es que el Gobierno de Marruecos n cumple el acuerdo firmado con el Gobierno central español para readmitir a aquellas personas que han utilizado su zona para introducirse en la ciudad autónoma, porque no reconoce la españolidad de Ceuta y Melilla.

"Si un inmigrante ha llegado a Algeciras vía Marruecos, ésta, inmediatamente, lo readmite, pero no si ha llegado a Ceuta y Melilla", dijo.

Ramírez alerta de que Melilla se está quedando sin capacidad "humanitaria y material" para atender a estos inmigrantes, cuyo número aumenta cada ve más, por lo que el alcalde de la ciudad, Ignacio Velázquez, mantiene contínuos contactos con el Ministerio del Interior para que trate de hacer que Marruecos cumple el pacto firmado con España y readmita las bolsas de inmigrantes que le llegan.

En su opinión, dado el incumplimiento marroquí -"salvo casos muy puntuales"-, una solución a este problema sería dotar a Melilla de mayores ayudas económicas para acoger a estos inmigrantes y darles trabajo, que es la principal causa del éxodo de estas persona.