Entre los expulsados se encuentra Manuel Fajardo Ruiz, codenado por violar a una mujer en una pensión después de detener al compañero de la víctima.

También tendrá que dejar de ser funcionario Guillermo López Madroñal, que prestó su arma a un atracador pra que robara la caja de un supermercado en San Sebastián.

La misma suerte correrá Jorge Grasses Mullerach, que atracó hace dos años 811.000 pesetas en una sucursal bancaria de Hospitalet de Llobregat con un arma sin documentación.

El Consejo de la Policía también decidió la expulsión de un agente estinado en Miranda de Ebro (Burgos) que robaba coches y les cambiaba la matrícula, y a otro funcionario destinado en San Sebastián que traficaba con cocaina.

Los restantes sancionados con separaciones temporales del cuerpo están acusados de diversas faltas graves como embriaguez en horas de servicio, consumo de estupefacientes, robo o exhibicionismo. Una buena parte de ellos han sido también sancionados por desempeñar una segunda actividad al margen de sus cometidos policiales.