A través de un comunicado, Interior explicó que esta decisión fue adoptada tras una "reunión de urgencia" mantenida a partir de la una y media por Alonso con los máximos responsables de su departamento.

En este encuentro participaron el secretario de Estado de Seguridad, Antonio Camacho, y los directores de la Policía y la Guardia Civil, Víctor García y Carlos Gómez Arruche, respectivamente, así como los jefes operativos de ambos cuerpos.

Según Interior, tras hacer una evaluación de la situación de Londres, el ministro dio instrucciones para activar el máximo nivel de alerta y operatividad recogido en el Plan de Prevención y Protección Antiterrorista (Nivel 3).

VIGILANCIA DE EDIFICIOS

Este nivel de alerta, según el comunicado, implica la "absoluta movilización" de las Fuerzas de Seguridad "para vigilar y proteger los lugares de alta concentración de personas, así como los objetivos estratégicos imprescindibles para el normal funcionamiento de la actividad ciudadana".

Entre estos lugares en los que se mejorará la vigilancia se encuentran las grandes superficies comerciales, las grandes infraestructuras de transportes, los acontecimientos deportivos y las áreas o edificios emblemáticos de las ciudades en las que puede darse una afluencia masiva de personas.

Por lo que se refiere a los objetivos estratégicos, los que se consideran más importantes son los relacionados con el sector energético, los centros de abastecimiento de hidrocarburos, las plantas de regasificación, las redes de agua potable y, entre otros, los centros de comunicaciones.

Además, las Fuerzas Armadas realizarán tareas de apoyo en la vigilancia y protección de las grandes infraestructuras de transportes, de los objetivos estratégicos y del espacio aéreo.