Los paros, convocados por los sindicatos CCOO, FETE-UGT, STEs, CSIF y CGT, afectarán a unos 24.000 docentes interinos que trabajan en las comunidades que dependen del MEC, ya que las que tienen compeencias educativas no implantarán este sistema.

Según explicaron hoy en rueda de prensa los portavoces de los sindicatos, el MEC ha impuesto una nueva fórmula para el curso 1992-93, por la que la contratación de interinidades se hará mediante el concurso de pposición de acceso a la función docente, un sistema que calificaron de "chapuza".

Además, a los sindicatos les ha molestado no sólo el contenido de la orden ministerial del 6 de mayo, que establece la convocatoria de oposiciones y la lista de nterinidades, sino el método utilizado por el MEC, ya que la citada norma fue aprobada antes de que concluyera la negociación en la mesa sectorial.

A juicio de las organizaciones sindicales, el desarrollo de la LOGSE se está haciendo sin consenso, no existe proceso de negociación y la polémica orden "es la gota que ha colmado el vaso, porque supone una ruptura unilateral de los acuerdos mantenidos hasta ahora con la Administración y el abandono por parte de todos los sindicatos de la mesa de negociacin".

El nuevo mecanismo de contratación de interinos modifica el sistema de baremación utilizado hasta ahora para que los docentes que no podían optar a ser funcionarios se inscribieran en las denominadas "bolsas de contratación", con el fin tener acceso, a través de una oferta de empleo para todas las especialidades, a una plaza vacante como interino.

Los sindicatos pactaron con el MEC un acuerdo de tres años, que finaliza el próximo curso, por el que se establecía la oferta anual de vacantes a ls que podían aspirar los docentes inscritos en la bolsa 1 y que para este año es de 8.700 plazas.

Existen dos bolsas más, las 2 y 3, en las que figuraban los docentes que hubieran trabajado como mínimo durante cinco meses, que se sometían a un concurso de méritos en el que se evaluaban la experiencia docente, los méritos académicos y la calificación del examen oposición al que se hubieran presentado.

Ahora, sin embargo, para pertenecer a esas bolsas se exigirá que los profesores se examinen cada ño en el concurso-oposición para el acceso a la función docente. Según la nota que obtengan, y sin tener en cuenta el tiempo que hayan trabajado en el sistema educativo, tendrán prioridad o no sobre sus compañeros para conseguir la vacante.

Esta fórmula, según los sindicatos, repercutirá negativamente en los docentes que no puedan presentarse al concurso-oposición a la función docente porque no se convoquen plazas de su especialidad, ya que no sólo no podrán optar a ser funcionarios, sino que no dispodrán de nota para pertenecer a las bolsas de contratación y, por tanto, acceder a una vacante como interino.