"Lo único que esto expesa", manifestó a Servimedia David Alcázar, portavoz del MOC, "es que la insumisión cada vez va calando más en la sociedad y cada vez llega a más sectores, que hay más gente que se revela contra la vieja idea de que hay que cumplir, de que hay que colaborar con el ejército".

En opinión de Alcázar, el hecho de que la insumisión se extienda a familiares de personas que han sido legisladores o han participado directamente en el Ejército demuestra que no se va a acabar con este problema mediante leyes ni arginando a quienes adoptan esa actitud.

El portavoz del MOC recalcó que el Estado sigue sin ser capaz de ofrecer una opción al servicio militar y a la prestación social sustitutoria y subrayó que la solución final al conflicto es la desaparición definitiva de cualquier clase de ejército.