Aunque esa medida ya estaba prevista para los alumnos de los últimos cursos de bachillerato, el Ejecutivo galo ha decidido generalizarla a todos los cursos.

La "nota de comportamiento escolar" evaluará la asistencia, el respeto a los reglamentos internos de los institutos y la participación en las actividades extraescolares, así como la actitud hacia los profesores, el personal y el material de los centros educativos. Esta calificación será emitida por las Juntas de Evaluación, en las que participarán los profesores y los directores de los institutos.

"Tener aprobados los exámenes de educación vial de secundaria y actitudes como ayudar a compañeros con discapacidad, también podrían aportar puntos", indicó Robien.

Un decreto, cuya publicación está prevista para la próxima primavera, recogerá las disposiciones que regularán esta nota, aunque la Inspección Nacional de Educación de Francia ha manifestado en un informe las dificultades para definir los conceptos que determinarán esta calificación.

Por otro lado, algunos sindicatos docentes se han mostrado en contra de esta medida, ya que en su opinión la conducta no influye sobre el aprendizaje de conocimientos y la han calificado como una "concepción moralizante del éxito escolar"