EL INSTITUTO DE LA MUJER APOYA LA REDUCCION DE LA JORNADA LABORAL, SIEMPRE QUE AFECTE POR IGUAL A AMBOS SEXOS

MADRID
SERVIMEDIA

La directora general del Instituto de la Mujer, Marina Subirats, considera que la reducción de la jornada laboral puede ser positiva, siempre que afecte por igual a hombre y mujeres.

Marina Subirats declaró a Servimedia que el instituto rechazará "cualquier medida de reducción de horarios de trabajo, si sóloafecta a la mujer esa medida".

"Soy partidaria", dijo, "de que hombres y mujeres vayamos trabajando cada vez menos horas para que podamos dedicar más tiempo a la familia, los amigos y las relaciones".

No obstante, la directora general del Instituto de la Mujer recordó que "el derecho al trabajo es individual y no familiar. Por ello, lo que estamos intentado es dotar a las mujeres de los medios necesarios para que puedan insertarse en el mercado de trabajo".

Subirats indicó que "ya ha habido oces que han apuntado que las mujeres podrían trabajar menos tiempo o dejar de trabajar. Eso es lo que no se puede aceptar".

La directora general del Intituto de la Mujer explicó que habría que facilitar el acceso a un contrato a tiempo parcial a aquellos hombres y mujeres que "en algún momento de su vida así lo deseen".

"Sí, al tiempo parcial", explicó, "pero no sólo para las mujeres, porque entonces nos condenamos a tener siempre un papel secundario en el mundo de la producción y nunca podremosestar en puestos de decisión".

"LAS MUJER SUFRE MAS LA CRISIS"

Según Marina Subirats, la mujer sufre con mayor virulencia las crisis económicas como la actual, ya que "tradicionalmente han actuado respecto al mercado de trabajo como reserva de mano de obra. Cuando hace falta mano de obra se tira de la mujer, y cuando no hace falta se la manda a casa".

A su juicio, las dificultades que hoy sigue encontrando la población femenina para acceder al mercado de trabajo hace que "las chicas jóvenes tenan una voluntad y una capacidad de trabajo mucho mayor que los chicos".

A pesar de esta circunstancia, la máxima responsable del instituto lamentó que las tasas de paro sean mucho mayores entre la población femenina.

"Se contratan más hombres", agregó, "y se contratan más hombres en posición más estable y con unos niveles de ingresos que son superiores".

Marina Subirats ilustró estas aseveraciones indicando que un estudio realizado en Barcelona reveló que mientras que un 11 por ciento de loshombres que trabajaban 1990 ganaban más de 200.000 pesetas mensuales, sólo un 1,5 por ciento de las mujeres trabajadoras superaban esa cantidad.

(SERVIMEDIA)
22 Nov 1993
GJA