"Hay además", continúa "Injuve", "dificultades específicas para estudiar lejos de casa, aceptar un trabajo en otra ciudad, etc.".

Según la revista del Instituto de la Juventud, "entre 1984 y 1989, el número de jóvenes que viven independientes de la familia ha decrecido en toda España en un 20 por ciento", habiendo crecido el porcentaje de jóvenes que comparten vivienda con otros chicos o chicas.

"Injuve" constata que, paraójicamente, "los y las jóvenes quieren independizarse antes, pero no pueden hacerlo, sino más tarde que las generaciones precedentes".

En cuanto a las soluciones al problema de la vivienda, el editorial afirma que "queremos coincidir con el Consejo de la Juventud de España en la necesidad de reformar el 'decreto Boyer' sobre alquileres".

También apunta la publicación del Ministerio de Asuntos Sociales hacia la "demanda urgente de una ley del suelo, que facilite una política de viviendas municipals; aumento de las cooperativas o promotoras sociales sin ánimo de lucro, que corten de raíz el cáncer especulativo; incremento del mercado de alquileres, con políticas de incentivos, patrimonios municipales de alquileres; medidas fiscales y financieras, etc.".