Segúnel documento, en el primer trimestre de 1997 se han registrado 28 casos de agresiones por parte de grupos urbanos violentos. En una ocasión, el pasado 3 de marzo, la agresión a un paracaidista en Alcalá de Henares acabó con resultado de muerte.

La mayor parte de los agresores estaban relacionados con bandas de ideología neonazi, skin-heads y "gamberros pastilleros", que practican su violencia contra personas de colectivos diferenciados (negros, inmigrantes, mendigos, homosexuales, prostitutas, etc.) ycontra jóvenes que se cruzan en su camino o simplemente les miran.

Las zonas urbanas de copas siguen siendo los lugares más habituales donde se registran agresiones u otros tipos de incidentes similares.

RESPUESTA INSTITUCIONAL

El informe de "Jóvenes contra la Intolerancia" destaca la ausencia de iniciativas parlamentarias y la inexistencia de un plan global de prevención de la violencia urbana, pese a ser un fenómeno que en la actualidad está presente en la mayoría de las ciudades españolas. Asimismo, critica la postura de la Asamblea de Madrid y del Gobierno de la Comunidad, que a su juicio continúan sin desarrollar ningún programa preventivo al respecto. Lo mismo ocurre, según esta organización, con los ayuntamientos.

El documento destaca, sin embargo, la iniciativa de la Delegación del Gobierno en Madrid, que ha impulsado el programa "Convivir es vivir" para fomentar los valores de tolerancia y convivencia en los centros escolares.

CASOS SIN RESOLVER

"Jóvenes contra la Intoleancia" recuerda también que todavía siguen sin ser detenidos los autores del asesinato del joven David González, muerto en Moncloa a manos de un grupo ultra. Igualmente, todos los procesados por la muerte del joven David Alfonso, que fue agredido en el parque de la Arganzuela, gozan de libertad.

El documento insiste en que nunca hubo detenidos por el crimen del joven Jesús Sanchez, muerto en la Plaza de las Comendadoras, quien dijo antes de fallecer haber sido agredido por 'skin-heads'. En la actualidd, también sigue sin aclararse judicialmente la muerte de Susana Ruiz, cuya familia y un forense aseguran que fue asesinada.

La ONG considera urgente y necesaria la puesta en marcha de una campaña de sensibilización de la opinión pública que persiga la deslegitimización social de la utilización de la violencia y el desarrollo de programas educativos y formativos que promuevan valores contrarios a la violencia. Además, pide mensajes inequívocos de los poderes públicos para que ninguna conducta violentaquede sin sanción.