Según explicó en rueda de prensa el vicealcalde, Manuel Cobo, este servicio se creó para garantizar que el esfuerzo solidario y colectivo que supone la construcción de vivienda pública tenga como destinatarios a ciudadanos que cumplen las condiciones que fija la normativa.

Para comprobarlo, el Sivim realiza inspecciones sistemáticas, que al día de hoy suman un total de 379.094 visitas de inspección realizadas a las 17.785 viviendas que han sido promovidas o componen el patrimonio municipal de vivienda protegida.

En caso de constatar irregularidades, la Empresa Municipal de la Vivienda y Suelo (EMVS) abre un proceso encaminado a la recuperación de la vivienda para su posterior adjudicación a familias que tengan necesidad real de la misma.

Según Cobo, la inmensa mayoría de los adjudicatarios cumplen con los requisitos establecidos por la normativa. En las inspecciones realizadas se detectaron 2.691 incidencias, de las que ya se han archivado 2.133 tras la oportuna comprobación del cumplimiento de los requisitos.

Además, se han abierto también 558 expedientes que están siendo objeto de estudio para proceder, en su caso, a la interposición de la correspondiente demanda judicial que permita recuperar las viviendas de los adjudicatarios que hayan incumplido las condiciones de adjudicación. Hasta la fecha, se han recuperado 71 viviendas.

Las irregularidades más comunes se agrupan en cinco bloques: no habitar la viviendas, 58%; en la vivienda reside una persona diferente al adjudicatario, 31%; adjudicatario fallecido, 4%; no facilita los datos, 4%, mientras que un 1% del total de expedientes tramitados corresponde a otros casos.