"En los últimos cuatro años", explicó Maravall, "hemos incrementado la vía de la concertación con el ámbito privado, ya que cada vez hay una oferta más rigurosa y flexible y, además, es más barata".

Actualente, el Inserso tiene un total de 4.000 plazas concertadas, siendo la mayor parte de ellas para personas de la tercera edad impedidas físicamente y que necesitan ayuda.

En opinión de Maravall, las residencias privadas de la tercera edad cuentan cada vez con profesionales más serios y rigurosos en servicios sociales, por lo que esta vía se ha convertido en imprescindible para la Administración pública.

La política de concertación del Inserso está en marcha en todas las comunidades autónomas españlas, aunque se ha centrado principalemne en la comunidad andaluza y valenciana.

INTERES EMPRESARIAL

"El sector hotelero, profesionales ligados al ámbito socio-sanitario o a otros intereses económicos", señaló el responsable del Inserso, "han comenzado a invertir para la creación de residencias de la tercera edad".

También confirmó que algunos grupos financieros importantes del país, como por ejemplo Argentaria, que está estudiando la posibilidad de realizar una importante adaptación de inmueble al sistema de residencias.

A su jucicio, "esta vía es cada vez más rentable, aunque en el ámbito de los servicios sociales no pueden hacerse grandes fortunas".

Alrededor de 20.000 ancianos figuran actualmente en lista de espera para entrar en una residencia de ancianos dependiente del Inserso.