"Los 47 millones de personas con discapacidad que viven en la Unión Europea son una amplia y variada comunidad, pero sus necesidades y obstáculos suelen ser similares", dijo Pavan-Woolfe en Bruselas, en una jornada convocada con motivo del Día Europeo de la Discapacidad, que se celebra mañana.

"La inclusión social de esta parte de la población es el gran desafío", añadió. "Y para lograrlo es necesaria su inclusión laboral, que ha sido el eje central de la primera fase de este plan, que ha abarcado desde 2003 hasta 2005".

A partir de ahora y hasta 2010, las metas serán "promover la colaboración entre la Unión, los gobiernos nacionales y locales y los actores sociales", "hacer posible el acceso a la asistencia y a servicios de apoyo para las personas con discapacidad" y "lograr el acceso de estos ciudadanos a los bienes y servicios sociales".

Este último objetivo supone no sólo la accesibilidad en materia de transportes y acceso a edificios. Más allá de las barreras físicas, "la iniciativa I-2010 de la Comisión Europea promueve la accesibilidad de las nuevas tecnologías de la información", para caminar hacia una sociedad del conocimiento "inclusiva".

Para lograr estos objetivos, Pavan-Woolfe resaltó los avances que previsiblemente se lograrán en el año 2007, declarado Año Europeo de la Igualdad de Oportunidades.

Por último, para "renovar los objetivos de la estrategia de Lisboa", según Pavan-Woolfe, es básico conocer y analizar la situación y los progresos en materia de discapacidad en el seno de la UE.