En un comunicado, el Insalud precisa que la norma que la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM) pretede impugnar está amparada en una ley ordinaria, no en una ley presupuestaria, como argumenta la confederación.

El precepto introducido en la Ley de Acompañamiento, señala la nota, no es ni más ni menos que un desarrollo de lo ya previsto en la Ley 15/97 de nuevas formas de gestión en el Sistema Nacional de Salud.

Reiteran que el decreto no impone ningún modelo a las comunidaes autónomas, ya que su ámbito se circunscribe al Insalud y trata de facilitar sus posibilidades de actuación. El proceso detransferencias, en su opinión, no puede impedir a las autoridades sanitarias establecer las directrices que estimen más adecuadas para la asistencia sanitaria.

Afirman que las futuras fundaciones públicas sanitarias no vulneran en ningún caso la gratuidad del sistema, ni tampoco las restantes formas de gestión. El real decreto dice "clarísimamente que las prestaciones sanitarias se otorgan en los mismos términos que en el resto del Sistema Nacional de Salud".

Esta regulación de fundaciones, segúnseñala el comunicado, tampoco vulnera la LOFAGE porque "al establecerse por una ley la posibilidad de creación concreta por un acuerdo del Consejo de Ministros, lo que se ha hecho en este punto es derogar la ley citada en prinmer lugar, de acuerdo con el axioma que dice que una ley posterior puede derogar lo establecido en otra anterior".

Además, indican que la posibilidad de transformación de los cnetros sanitarios excederían con mucho de un método que consistiera en llevar por ley la transformación e cada centro al Parlamento, lo que no tendría ningún sentido, ya que en el supeursto que los 82 hospitales dle Insalud y las 52 gerencias de primaria pidieran la autonomía deberían ir al Parlamento 134 leyes.