"El capítulo de inversiones se aprobó en los Presupuestos Generales del Estado y, por lo tanto, no iene ningún sentido presentar como novedoso algo aprobado a finales del año pasado. Primero lo venden como incremento de presupuesto, ahora como inversiones y mañana lo venderán como otra cosa distinta", añadió.

A juicio de la Fadsp, estos incrementos presupuestarios deberían incluirse no sólo en años electorales. "Entendemos que la financiación de la Sanidad pública necesita más dinero. El país gasta un porcentaje del PIB bastante modesto en relación con otros estados de la Unión Europea y que ese inrmento debería distritubirse entre los distintos capítulos presupuestarios", dijo.

El doctor Sánche-Bayle insistió en que los gastos en infraestructuras no deben destinarse prioritariamente a la creación de nuevos centros, sino también a la reforma de los ya existentes.

También manifestó sus dudas sobre cómo mantendrán este capítulo tras la desviación del gasto farmacético que está experimentando y espera que no acabe enjugándose con el dinero destinado a inversiones.