Con estas manifestaciones, Caldera replicó unas declaraciones del portavoz del PP en la Comisión de Interior del Congreso, Ignacio Gil ázaro, quien aseguró que el partido que representa a los GAL no puede dar lecciones al Gobierno en materia de respeto a los derechos humanos.

El dirigente socialista aseguró que el GAL está en los tribunales, "que es donde debe de estar", y que de lo que se trata ahora es de que el Ejecutivo responda a las graves acusaciones lanzadas desde un sindicato policial sobre una operación de expulsión de inmigrantes, en las que al parecer hubo un tratamiento indigno a estas personas.

Caldera señaló asimimo que el Gobierno socialista jamás utilizó los medios que ahora se están poniendo en tela de juicio y que el PSOE no tiene inconveniente en que ahora se investigue el procedimiento seguido en las expulsiones de inmigrantes durante los años en que estuvo en el Gobierno.

El dirigente socialista reiteró que los populares quieren "tapar" un serio problema al que tendrán que hacer frente, al tiempo que acusó al presidente del Gobierno de contribuir a crear más confusión al afirmar que "tenían un problemaque lo han solucionado".

A su juicio, tales manifestaciones son "nefastas" y Aznar las ha pronunciado con un "desparpajo rayano en esa intolerancia que le suele caracterizar. Si todos los problemas que se encuentren van a solucionarlos así, que Dios nos pille confesados", concluyó.