Esta organización ha expresado su "indignación" y "preocupación" por la Instrucción 3/2003 de la Fiscalía General del Estado, relativa al retorno de menores extranjeros que entran ilegalmente en España, en la que se insta a los fiscales a no solicitar la tutela de extranjeros mayores de 16 años y a proceder a su retorno, "incumpliendo con ello la normativa internacional y estatal de protección de menores".

SOS Racismo cree que la orden vulnera la Convención e Derechos del Niño por considerar al menor extranjero como un inmigrante y no como un menor que cuenta con los mismos derechos que los menores nacionales de los estados firmantes de la Convención.

Además, la organización tacha de "maliciosa" la interpretación que la instrucción hace del artículo 172 del Código Civil, relativa al acogimiento de menores en situación de desamparo, al considerar que un extranjero mayor de 16 años, por el hecho de estar en otro país, tiene una "vida independiente", lo queviola la normativa internacional y estatal de protección de menores.

Asimismo, SOS Racismo dice que la instrucción "cierra los ojos a la problemática familiar y social que viven estos menores en su país de origen, y en territorio español por el hecho de estar en otro país.

A juicio de SOS Racismo, "tampoco se puede hablar de saturación de los recursos sociales para menores en el Estado, achacando además estas carencias a los menores extranjeros y generando con ello xenofobia, cuando los presupuesos y recursos son cada vez menores y sin ninguna preparación para esta particular realidad".

Finalmente, esta entidad exige la retirada de la instrucción, pide a los fiscales que se opongan al cumplimiento de la misma y anuncia que informará de su existencia a las instituciones internacionales de protección del menor.