A su juicio, el Gobierno tendría que haber buscado una solución socio-laboral a este colectivo, que, según dijo, llevaba ya en España más de 8 meses y algunos, incluso, habían aprendido castellano.

En este sentido, Mariño declaró a Servimeia que si los inmigrantes "sin papeles" deben ser devueltos a sus países de origen, el Ejecutivo debería hacer las repatriaciones "más rápidas y más transparentes".

También destacó la importancia de que el Gobierno establezca mecanismos para facilitar la busqueda de trabajo a estas personas, y añadió que, una vez que encuentren trabajo, se les facilite la residencia, aunque hayan entrado de forma irregular en España.

Además, Mariño consideró "excesiva" la presencia de 84 policías para repatriar aeste grupo de inmigrantes, porque de ese modo se da la sensación de que los nigerianos eran "personas peligrosas".