Fernández-Miranda destacó hoy, en una entrevista a Radio Nacional de España, algunas de las reformas de la Ley que se están estudiando, como hacer imposible las regularizaciones extraordinarias y hacer desaparecer las leyes que hacen posible el paso automático de la ilegalidad a la legalidad.

"También estamos estudiando endurecer las penas para los traficantes de seres humanos, así como a las personas que contratan a inmigrantes en condiciones de vida vergonzosas para explotarlos" afirmó.

El máximo resposable en Inmigración, no precisó el plazo en el que estas reformas podrían llevarse a cabo y explicó que se trata de un proceso que pretende contar con el "apoyo de la oposición", pese a que piden una política de puertas abiertas y de papeles para todos. "Tenemos tiempo para hablar y conocer las alternativas a la Ley de Extranjería", dijo Fernández-Miranda.

Finalmente, recordó que el presidente del Gobierno, José María Aznar, pedirá en la cumbre que se celebrará en Sevilla que todos los países que quieran colaboración para su desarrollo deberán colaborar con España para conseguir controlar la inmigración en nuestro país.