"El gran reto", explicó, "va a ser conseguir la perfecta itegración de los residentes extranjeros entre nosotros. Hay tres puntos que ya estamos cuidando, que son el del estatus de legalidad, el del contrato firmado en su país de origen y el de la reagrupación familiar, que son los tres pilares fundamentales en los que esta integración perfecta va a conseguirse. Ese es el gran objetivo, para, no solamente el 2002, sino para lo que nos queda de legislatura".

Fernández-Miranda recordó que no va a haber nuevos procesos de regularización de inmigrantes irregulars. "Además", recalcó, "se ha demostrado que no son el instrumento adecuado para la ordenación de los flujos migratorios"

"Hemos decidido que será el sistema de contingente o el del cupo el que vaya llenando todas las ofertas de empleo que seamos capaces de generar y seamos capaces, por lo tanto, de ofrecer a terceros países", comentó.

Con motivo de la Presidencia española de la UE, el secretario de Estado para la Extranjería indicó que "nos vamos a centrar en dos esfuerzos, uno la lucha contra lainmigración ilegal, por lo tanto, la presentación de un programa específico para combatir la inmigración ilegal, sinónimo de explotación en el cien por cien de los casos; y dos, vamos a esforzarnos por conseguir unos criterios comunes, una directiva que ponga en marcha criterios comunes para la concesión de asilo o refugio, que será un avance normativo muy importante para toda la Unión Europea".

"Más allá de eso", añadió, "hay otras iniciativas: la policía de frontera, la posibilidad de la creación deun banco europeo de visados, la puesta en marcha de oficinas consulares únicas de la Unión Europea en cualquier país. Una serie de iniciativas que caminan todas ellas hacia el mismo objetivo, compartidos por todos los estados miembros: el establecimiento de una política común en extranjería e inmigración".