Rodríguez, que compareció hoy en la Comisión Especial del Senado que estudia el fenómeno de la inmigración, comentó que hay inmigrantes que, tras un año o dos como residentes legales, se ven abocados a la irregularidad por los retrasos de la Administración en renovar sus permisos, incluso, con pérdida de oferas de empleo en algunos casos.

La responsable de Servicios de Cruz Roja también mostró su preocupación por los menores de edad que han sido acogidos y tutelados por la Administración y que al cumplir la mayoría de edad caen en la irregularidad por estos retrasos administrativos en la concesión de permisos.

Según dijo, el Gobierno debería reforzar las oficinas de la Administración y los consulados encargados de tramitar estos permisos si se quiere, según recalcó, apostar por la inmigración regular

Rodríguez también advirtió sobre la situación de los inmigrantes que no pueden ser expulsados por no haber convenio de repatriación con su país de origen. "Es un tema delicado y complejo que debemos abordar", indicó.

Por otro lado, Rodríguez destacó que esta entidad humanitaria desarrolla varios proyectos con inmigrantes, como los de acogida y atención cuando llegan en pateras a las costas españolas o los de formación e integración laboral, de los que destacó su importancia "porque creemos que l única forma de integrar a las personas es a través del empleo".

Según dijo, un total de 126.000 personas se beneficiaron en 2001 de los diversos programas de acogida de Cruz Roja, por los que se facilita a los recién llegados alojamiento y manutención, reconocimiento médico e información sobre sus procesos legales.

Además, un total de 4.163 inmigrantes han estado alojadas en los centros de acogida de Cruz Roja, la mayoría de ellos mujeres y niños.

En cuanto a los programas de asesoramiento,formación y empleo para inmigrantes, Rodríguez señaló que en el primer semestre de 2002 se beneficiaron de esta iniciativa un total de 9.949 personas (4.000 mujeres y 5.949 hombre), de los que 2.011 firmaron un contrato de trabajo.