Mariño declaró a Servimedia que ese ataque es "increible y absurdo, tiene raíces xenófobas, para impedir el establecimientos de colonias marroquíes" en la zona.

Según dijo, las funciones de un consulado son "notarial, de paz y de facilitar la protección de los ciudadanos a los que representa".

A su juicio, la meora de las relaciones entre España y Marruecos, actualmente en crisis, favorecerían el desarrollo de las misiones encomendadas a ese consulado.