Los sindicatos vienen rclamando la necesidad de abrir un cauce de interlocución entre sindicatos, empresarios y Gobierno para abordar no sólo la situación de los trabajadores inmigrantes sin permiso, sino también las políticas de migración laboral posibles con la nueva Ley de Extranjería.

A juicio de ambos sindicatos, la entrada en vigor de la nueva ley el pasado mes de enero, la firma de convenios bilaterales de migración laboral y el Programa Greco, entre otros aspectos, colocan a la inmigración y la integración de estos rabajadores en un nuevo escenario.

Aunque rechazan la nueva Ley de Extranjería, por considerarla poco adecuada para regular la inmigración en España, los sindicatos son conscientes de que es en el marco normativo actual en el que hay que buscar soluciones a los problemas que hoy tiene planteados la inmigración.

Por su parte, CEOE cree que hay una parte del problema de la inmigración que está relacionado con el mundo laboral y las empresas, y, en ese terreno, considera que hay que cambiar el model de inmigración ilegal y clandestino a través de las mafias que llega a España por un modelo legal, con garantías para los trabajadores que vienen, según indicó hoy a Servimedia un portavoz de la patronal.

El portavoz de CEOE explicó que en España hay unas necesidades de mano de obra en sectores como la agricultura, la hostelería y la construcción, fundamentalmente, "y los inmigrantes que vienen a trabajar es algo perfectamente justificado".

"Vamos a ver si entre todos conseguimos pasar de un modlo de inmigración ilegal, clandestina y en manos de traficantes y mafiosos que ahora mismo se está produciendo, a un modelo de inmigración legal, que dote de todas las garantías jurídicas a los trabajadores que llegan, con una oferta de mano de obra ajustada a la demanda y hasta con procesos de formación previos en los países de origen", agregó.