Zapatero se dirigió a cerca de un millar de militantes que se congregaron ante la nueva sede del Partido Socialista del País Vaslenciano (PSPV-PSOE), inaugurada esta tarde por el secretario general de los socialistas y por el líder del partido en esta comunidad, Joan Ignaci Pla. Ambos descubrieron en el salón de actos de la sede una placa conmemorativa del día de la inauguración.

Aunque comenzó criticando al Gobierno y pidiendo a su presidente, José María Aznar, "más respeto por la política",el líder socialista se negó a "darle caña" y abogó en su lugar por "darle ejemplo, que es lo que necesita".

En virtud de esta actitud, Zapatero expresó su confianza en que los 3.000 metros cuadrados de la nueva sede se llenen de ideas y propuestas alternativas y la dedicó a "esos miles de trabajadores extranjeros a los que llaman ilegales pero que son seres humanos".

A continuación, criticó la "hipocresía moral" del Gobierno y llamó a todos los valencianos a luchar contra esa actitud defendiendo u compromiso con los valores cívicos y democráticos, y recordando que España ese un país de emigrantes.

Rodríguez Zapatero también tuvo un mensaje específico para los dirigente y militantes de esta federación, castigada en los últimos años por una grave crisis interna. "Menos debate sobre nosotros y más servicio público", les dijo.

Los socialistas valencianos han dedicado el salón de actos de esta nueva sede inaugurada hoy al ex ministro socialista asesinado recientemente por ETA, Ernest Lluch. S nombre figura en una placa conmemorativa en dicho salón.