Fuentes de la investigación afirmaron que la cifra del dinero presuntamente blanqueado asciende a cuatro millones de dólares (alrededor de 450 millones de pesetas), dos millnes de dólares más de lo estimado inicialmente.

El juez mallorquín comunicó ayer domingo a los acusados su ingreso en la prisión de Palma, y la investigación será continuada a partir de ahora por el magistrado de la Audiencia Nacional Baltasar Garzón.

Los acusados operaban desde la localidad mallorquina de Santa María, a través de una red de empresas del ramo de la alimentación con sede en varios puntos de las islas y de la península, y que trabajaban con países del cono sur americano, de donde s importaban productos como conservas de cangrejo.

Los dos empresarios estaban siendo investigados desde hacía meses por efectivos de la Brigada de Delitos Monetarios en Madrid, en colaboración con el Cuerpo Superior de la Policía Nacional de Palma de Mallorca.