En un comunicado, el INITE, que representa al colectivo más numeroso de la ingeniería española, con más de 250.000 titulados, aseguró que el sistema de habilitación supone "una agresión" para estos profesionales, ya que "reduce drásticamente las áreas de conocimiento" en las que podrán impartir la docencia, de 47 a 10.

"Este ataque injustificado imlica una discriminación frente a otros colectivos docentes nacionales y comunitarios, y habrá de afectar negtivamente a la calidad de la formación", afirma el INITE.

Este organismo se queja de que se crearán mecanismos que favorecerán el acceso a la docencia de titulados que díficilmente podrán haber obtenido formación en esas áreas de conocimiento.