El diputado socialista Manuel Casero señaló que en las prisiones de la CAM no hay trasgresión de los derechos humanos y que los presos no son vejados, mientras que el parlamentario de IU Luis Alonso Novo dijo, en tono irónico, que tras la lectura del informe "dan ganas de irse a vivir ahí dentro".

Alonso ovo declaró durante su intervención en la citada comisión que los que han participado en la elaboración del documento no han tenido en cuenta la opinión de las madres de los presos que entraron sanos y han salido casi muertos.

Por su parte, el diputado popular Alfredo Navarro aseguró que, si el actual hacinamiento de las cárceles madrileñas no desaparece a través de la acción de los políticos, éstas se convertirán rápidamente en grandes escuelas de delincuencia.

"Ya es hora de que los partidos poíticos asuman la responsabilidad de sus palabras y luchen contra la discriminación en las prisiones", indicó Navarro.

A su juicio, es necesario emprender acciones que no siempre sean rentables electoralmente, "como la de construir prisiones dentro de las ciudades, cárceles con una capacidad máxima de 500 personas y abrir muchos más centros en regímen abierto".

CONTENIDO DEL INFORME

El informe presentado hoy en la Comisión de Derechos Humanos de la Asamblea de Madrid recoge la experiencia de un rupo de diputados de los diferentes partidos políticos, durante una visita que realizaron los días 20 y 21 de diciembre del año pasado a distintos centros penitenciarios.

Los parlamentarios visitaron la cárcel de Alcalá Meco, Alcalá Jóvenes y Alcalá Sección Abierta, la prisión de Carabanchel, el Hospital Penitenciario de Carabanchel y la Sección de Madres de Carabanchel.

El informe destaca que la mayoría de los centros disponen de un buen nivel de infraestructuras y equipamientos, a excepción de a prisión de Carabanchel, al que califica de centro saturado y obsoleto.

En cuanto a la situación de la cárcel de alta seguridad de Alcalá Meco, los diputados detectaron un cierto clima de tensión entre los funcionarios y los reclusos.

El informe señala también que hay una reducción del número de horas del encendido de la calefacción y del número de duchas en funcionamiento en los "vis a vis".

Sobre la comida que reciben los internos, el documento explica que el segundo plato "siempre llega río, aunque pueden elegir entre tres menús".

BARRACONES CONFORTABLES

Por lo que se refiere a la prisión en régimen abierto de Alcalá de Henares, el estudio indica que los internos "utilizan unos barracones que, si no son los más idóneos, al menos son confortables", al tiempo que aconseja ampliar estas instalaciones.

Sobre Carabanchel, el informe menciona el contraste tan notorio entre esta institución y otros centros penitenciarios, tanto por su obsolescencia como masificación, ya que "hay más e 2.300 internos cuando la cárcel sólo tiene capacidad para 1.000, lo que origina que una misma celda llegue a ser compartida por tres presos".

Existen también quejas sobre los registros a que son sometidos los visitantes de la cárcel de Carabanchel, aunque el estudio precisa que estos registros suelen ser fundados, ya que están centrados en sospechas de tráfico de drogas.

Respecto al tratamiento que ofrece el Hospital Penitenciario de Carabanchel, el documento lo compara al de cualquier otro hosital de la red pública.