El sector suma el tercer año de resultados positivos en términos reales (descontando la inflación), tras leves descensos reales de facturación entre 1998 y 2001.

La industria alimentaria contaba con 32.586 empresas el pasado año, lo que supone que en 2004 desaparecieron unas 700 empresas en España, una cifra positiva para Gil en comparación con el total de sociedades del sector.

Por primera vez en los últimos años, las exportaciones fueron superadas por las importaciones, bajando la tasa de cobertura al 87% a finales del ejercicio.

Por su parte, el secretario general de la FIAB, Jorge Jordana, acusó al Gobierno de incumplir su compromiso electoral de legislar un periodo máximo de 60 días para que la distribución comercial pague a los proveedores de productos de gran consumo no perecederos y haber alargado ese plazo a 90 días en la recientemente aprobada Ley de Morosidad, lo que en su opinión vulnera el espíritu del reglamento comunitario.

Por otro lado, Jordana mostró el interés de la industria en colaborar con el Ministerio de Sanidad en la campaña de lucha contra la obesidad, especialmente la infantil, y aseguró que las empresas cumplirán sus compromisos en este campo.

No obstante, la FIAB considera que la obesidad es consecuencia de múltiples factores, como el tipo de alimentos (grasos o no, frescos o no, etcétera), los hábitos alimenticios, la falta de ejercicio o la vida urbana. Por ello, la industria subraya que la tarea de concienciar a la sociedad debe ser "de todos", no sólo recaer en las empresas alimentarias.