Las cifras de la Fiscalía, dependiente de la Administración Central, suman los hechos delictivos conocidos por todos los cuerpos policiales (Ertzaintza, Guardia Civil, Cuerpo Nacional de Policía, Mossos, Policías locales) y por los juzgados. Según dichas cifras, Euskadi cerró el último ejercicio anual con 55,97 delitos por cada 1.000 habitantes, muy por debajo de la media estatal, situada en 91,58.

Cada una de las provincias de la Comunidad también se encuentra por debajo de la media estatal. Vizcaya tuvo el último año 61,43 delitos por cada mil habitantes, Alava, 57,63, y Guipúzcoa, 46,25.

Si las cifras de delincuencia en el País Vasco consideradas de manera global son netamente inferiores a las del Estado, también lo son si se analizan en función de los diferentes tipos de delitos. Los delitos contra el patrimonio (robos, hurtos, etc.) constituyen siempre la parte numéricamente más importante de la delincuencia. En este apartado, Euskadi, con 41,19 delitos por cada 1.000 habitantes, se encuentra siete puntos por debajo de la media estatal (48,64).

En cuanto al capítulo de las lesiones (agresiones familiares, malos tratos, etc.), la media estatal (19,25) casi cuadruplica la tasa vasca (5,40).

En los delitos contra la libertad (amenazas, coacciones, etc.) la tasa es de 1,03 frente a 1,68 del Estado.

En los delitos contra la seguridad colectiva (tráfico de drogas, conducción bajo los efectos del alcohol, etc.) la cifra estatal asciende a 1,91 frente a 1,34 de País Vasco.

Incluso en un apartado como el de los delitos contra el orden público, en el que se engloban todo tipo de desórdenes en la vía pública (peleas, riñas, agresiones a agentes de la autoridad, violencia callejera, etc.), la media estatal supera con 0,70 frente a 0,51.