José Francisco Mesa fue contratado por el ayuntamiento el 3 de enero de 1994 para realizar trabajos del PER con la categoría de peón albañil y un sueldo de 2.421 pesetas diarias.

El accidente se produjo cuando trabajaba con otros compañeros en la reparación de la techumbre de la caa cuartel de la Guardia Civil. Entonces apoyó los pies sobre una bóveda de yeso y ladrillos con numerosas grietas y humedad, y cayó al vacío desde una altura de 4 metros.

Según la sentencia, la caída le provocó fractura y luxación de algunas vértebras, por las que tuvo que ser hospitalizado y posteriormente intervenido el 17 de enero de 1994. Tras pasar por el Centro de Rehabilitación de Parapléjicos de Toledo, fue dado de alta el 8 de septiembre de ese año, quedándole como secuela una paraplejia por ección medular completa.