La extinción de los grandes incendios de las comarcas del Morrazo y del Barabanza no ha significado el descanso para los servicios de extinción, que trabajan ahora para sofocar los nuevos focos surgidos en Padrón, Cabañas y Teo en la provincia de La Coruña, Guitiriz en Lugo y Xermade en Orense.

Primero fueron las críticas por parte del diputado autonómico socialista Ceferino Díaz, quien indicó que el plan de lucha contra incendios de la Xunta "sólo funciona cuando llueve". A éste umaron los alcaldes nacionalistas de Cangas, Bueu y Moaña, en la provincia de Pontevedra, que abogaron porque el Parlamento vuelva a debatir un proyecto de política forestal, "ya que está demostrado que el elaborado por la Xunta no sirve".

Hoy, el Sindicato Labrego Galego (SLG) acusó al consejero de Agricultura, Tomás Pérez Vidal, de dejarse asesorar por técnicos vinculados al sector maderero. También la asociación ecologista Greeenpeace incidió en el mismo sentido, remarcando que los subasteros de maera son los grandes beneficiarios de los incendios.

En opinión de Manuel da Cal, portavoz del SLG, la promoción de la plantación de eucaliptos por parte de la Xunta no es más que una muestra de la política errada, ya que estas especies promueven la propagación de las llamas. Da Cal insistió en que la política forestal no corre paralela a la política agraria y denunció "que la Consejería no está motivando a los propietarios para que cuiden de sus montes".

Por su parte el portavoz de Greenpeace Maro Rodriguez reclamó una regulación del comercio de madera quemada, dada la dificultad de investigar en la autoría de los incendios.

Según Rodriguez, el hecho de que la madera quemada y la verde se fije al mismo precio, como se está haciendo en algunas zonas de Galicia, no acaba con el problema porque la madera quemada pesa menos, lo que da un mayor margen de beneficios y, por tanto, "hasta que no se acabe con ese margen de benficio tan grande no habrá incendios en los cuales estén detrás los madereros

Aunque no ha trascendido nada sobre su identidad ni sus posibles motivaciones, la ConseJería de Agricultura informó de la detención de un posible pirómano en el municipio de lucense de A Fonsagrada.