A primeras horas de la mañana del domingo, el cambio en la dirección del viento provocó la reactivación de las llamas que se repartieron en varios focos, los más importantes en la zona sur, con peligro para la vegetación del Parque Nacional de La Orotava.

Además de los tres hidroaviones que ahora trabajan en las labores de extinción, dos compañías del ejécito participan en los retenes de contención, además de miembros de protección civil, Icona, y numerosos voluntarios.

Por su parte, el presidente del Gobierno autónomo Canario, Manuel Hermoso aseguró que "no es gratificante la situación actual pero confío en que con los nuevos refuerzos se podrá dominar".

De momento, no ha habido ninguna persona herida, ni ninguna vivienda ha sido afectada directamente por las llamas, si bien han tenido que ser evacuadas varias familias por la cercanía del fuego,y varias granjas permanecen en peligro por la proximidad a los focos de incendio.