El siniestro, que los representantes de la Consejería de Agricultura y Pesca del Centro Reginal de Coordinación Contra Incendios consultados consideraron provocado, había arrasado ya un pinar de grandes dimensiones y afectaba también a montes de encinares y matorrales.

Además, explicaron que, según sus investigaciones, el fuego comenzó en cinco focos distintos y alejados, circunstancia que les lleva a pensar que fueron varias las personas que participaron en su iniciación.

A última hora de esta mañana, las llamas seguían progresando en varios frentes del siniestro, gracias a la fuerza dl viento, que hacía difícil los trabajos de extinción.

En esas labores, colaboraban dos hidroaviones, uno de Sevilla y otro de Madrid, equipos de Granada y numerosos efectivos del Ejército, además de los retenes de bomberos del Instituto Andaluz para la Reforma Agraria (IARA) y los de la Diputación, así como numerosos voluntarios de localidades cercanas.