Las instalaciones, situadas en la calle Ubeda, en el distrito de Fuencarral, tienen una superficie de 1.200 metros cuadrados y cuentan con nueve contenedores.

Seis de ellos (con una capacidad de 24 metros cúbicos) servirán para recoger muebles y enseres, uno para frigoríficos y aparatos de refrigeración,uno para vidrio, otro para papel y cartón, otros dos contenedores (de 750 litros) se destinarán a pilas botón y los restantes, para pilas convencionales.

Según las estimaciones que manejan los técnicos municipales, la previsión de recogida anual en dicho centro es de 450 toneladas de muebles y enseres viejos, 500 de vidrio, 250 de papel y cartón y 50 de pilas.

El coste del CRR de Fuencarral ha sido financiado por la empresa concesionaria de la limpieza viaria y recogida de residuos urbanos del ditrito, Fomento de Obras y Construcciones.

A lo largo de este año, el Ayuntamiento tiene previsto construir otros seis complejos similares en la calle Arquitecto López Otero (Moncloa), calle Sepúlveda (Latina), plaza José María Soler (Chamartín), Camino de la Estación de Hortaleza (en el distrito del mismo nombre) y Camino de Vallecas-Vicálvaro (Puente de Vallecas).

El alcalde hizo un llamamiento a los ciudadanos para que utilicen las instalaciones, ya que sin su colaboración las autoridades municpales poco pueden hacer por mejorar la limpieza de Madrid.

El Ayuntamiento se ha puesto en contacto con alguna entidad benéfica para que puedan estar interesados en la reutilización de los materiales que sean depositados en el CRR de Fuencarral.

Por su parte, la concejala de Medio Ambiente explicó que su departamento ha adquirido una máquina capaz de recuperar los clorofluorcabonados de los frigoríficos, que si no son tratados adecuadamente destruyen la capa de ozono.