Se trata de la primera gran obra de restauración de Patrimonio Histórico financiada con cargo al 1% cultural regional puesto en marcha en 2005 por el Gobierno de Aguirre, que supone la reserva del 1% del presupuesto de las obras públicas que se financian total o parcialmente por la Comunidad de Madrid para destinarlo a actuaciones sobre bienes protegidos por la Ley de Patrimonio Histórico de la región.

Aguirre destacó que tras varios años de trabajos, "ponemos el punto y final a la restauración de la Plaza Mayor de Chinchón y, al mismo tiempo, damos también un nuevo impulso a la promoción turística del municipio con la apertura del Centro de Interpretación Turística".

Entre las actuaciones llevadas a cabo en la plaza, destacan el desmontado de la cubierta, corrección y reposición de la estructura y reposición de los elementos constructivos; la consolidación de la estructura de pórticos, forjados y cubiertas; el ajuste de las piezas de madera, y la instalación de nuevo entablado en las galerías.

También han sido restauradas las balaustradas y todos los elementos de madera, así como de la cerrajería; y se ha picado toda la superficie de los muros para aplicar un nuevo revestimiento, según informó el Gobierno autonómico.

La Plaza Mayor de Chinchón es uno de los mejores ejemplos de plaza porticada castellana y su origen se remonta al siglo XV. Fue incluida como Conjunto Histórico Artístico de segundo orden en el Inventario de Protección de Patrimonio Cultural Europeo creado por el Comité de Ministros del Consejo de Europa en marzo de 1966, aunque la declaración oficial no se produjo hasta ocho años después, en junio de 1974.

La Plaza Mayor no ha sido el único espacio de Chinchón en el que la Comunidad de Madrid ha intervenido. A través de la Dirección General de Patrimonio Histórico, también ha actuado sobre significativos edificios de la ciudad, como la Iglesia Parroquial de Nuestra Señora de la Asunción, el Convento de las Clarisas y las ermitas de San Antón, San Galindo y San Roque.