IGLESIAS ZAMORA: "SI ESTOY CON MI GENTE VEO DIFICIL FLAQUEAR"

- El ingeniero, que no tomará vacaciones por el momento, volvió a la empresa Ikusi, por primera vez desde que fue secuestrado

- Asegura que está "como una moto" y que la reacción de la sociedad ante l secuestro le ha dejado "patas arriba"

SAN SEBASTIAN
SERVIMEDIA

Puntual a su cita con sus compañeros, a las seis de la tarde Julio Iglesias Zamora llegó a la empresa Ikusi, donde trabaja y cuyos empleados le esperaban para rendirle un homenaje por los 117 días de tortura que soportó durante su cautiverio en manos de la banda terrorista ETA y la gran entereza que ha demostrado.

A su llegada, Julio Iglesias, que mantenía su buen humor, dijo a los medios de comunicación que estaba "como na moto" y que la reunión con sus compañeros no era más que "un encuentro con su familia".

Aseguró que no cree que su entereza actual se venga abajo, porque "si estoy con mi gente veo difícil flaquear", aunque reconoció que durante el secuestro, en algunos momentos sí llegó a tener miedo. "Los agujeros negros no los quiero para nadie", comentó.

Sobre la entereza que todos destacaron del secuestrado, él mismo afirmó que "en Ikusi hay mucha gente como yo, por eso estamos donde estamos, con gran entreza y una gran estructura mental".

Iglesias no se considera un símbolo contra ETA, ni el símbolo del lazo azul, porque "los símbolos pasan". Tuvo palabras de agradecimiento a las organizaciones pacifistas y añadió que estaba convencido de que su familia y compañeros iban a tener una gran respuesta, pero que no se esperaba la reacción ciudadana, que le ha dejado "patas arriba".

Confirmó que no acudirá a la concentración que los trabajadores de Ikusi han convocado para el próximo jueves, porque "e agradecimiento es a la gente de Ikusi".

En cuanto a las pintadas aparecidas en fachadas de San Sebastián, en las que se agradece a Julio el supuesto pago del rescate, manifestó que no le da importancia y que la alegría de estar con sus compañeros lo supera.

Julio Iglesias no se tomará por el momento vacaciones. "Hay que pasar la página ya, comenzar a trabajar, ya tengo concertadas unas cuantas entrevistas para esta semana y para la que viene". Haciendo gala de una humor excepcional, dijo que quiás descansaría media tarde.

Poco después de hacer estas declaraciones a los medios de comunicación, Julio Iglesias subió al lugar donde se encontraban sus compañeros y entró en el recinto en medio de grandes aplausos que duraron varios minutos.

Entró saludando a sus compañeros de trabajo y se colocó en el centro, donde recibió un ramo de rosas blancas. Al fondo había una pancarta con la lectura "Julio con nosotros".

Poco después, Julio Iglesias comenzó a abrazarse y besar a algunos de los emleados de Ikusi, a muchos de los cuales las lágrimas les asomaron a los ojos. En el homenaje estaba presente el tío del secuestrado, Angel Iglesias, que alabó la labor de los trabajadores de su empresa y afirmó que no iba a dirigirles ninguna palabra, porque "está todo dicho".

(SERVIMEDIA)
02 Nov 1993
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