Según la Iglesia, el texto aprobado ayer por el Gobierno "supone que en la práctica, el aborto será libre en España, excluyéndose de toda protección jurídica al nasciturus durante las doce primera semanas de su vida".

"Los católicos", dice el citado comunicado, "tienen la obligación moral de poner todos los medios a su alcance para evitar que este atentado contra la vida humana llegue a ser realidad y nadie pueda sentirse ndiferente ante una decisión tan grave como la adoptada ayer por el Gobierno".

Esta decisión, según el Episcopado español, "está en contra de lo que el propio Tribunal Constitucional fijó en su sentencia de 1985 como exigencia no renunciable por el Estado: la necesidad de establecer una protección eficaz de la vida del concebido y no nacido, que incluya como última garantía las normas penales".

A juicio de la Iglesia, la nueva regulación del aborto que se introduciría en el futuro Código Penal, yque fue aprobada ayer por el Consejo de Ministros, "introduce un nuevo supuesto descrito en términos tan equívocos y ambiguos" que "hacen materialmente imposible una decisión objetiva por jueces y tribunales sobre la concurrencia o no del supuesto en cada caso".

El Comité se refiere al supuesto de "la salud o integridad física o moral de la embarazada" y "la existencia de un estado de angustia o ansiedad en la gestante y un pronóstico de riesgo para la salud".

Además, consideran que la introduccin de la indicación socioeconómica para abortar está recogida en la referencia a "las condiciones personales, sociales o familiares".