Según informó hoy la empresa a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la operación supone unos ingresos para IBV de 90,507 millones de euros. Tras esta enta, la participación de la corporación en Gamesa se sitúa en el 31,8%, por lo que se mantiene como su accionista de referencia.

El objetivo de esta desinversión es incrementar el capital flotante de las acciones de Gamesa, con lo que supera el 40%, y consolidar así su trayectoria bursátil para incrementar los niveles de contratación y de cotización.